En el marco del enfoque cognitivo prototípico, que parte del presupuesto de que la sintaxis está motivada por la semántica y la pragmática, el presente trabajo sostiene la hipótesis de que en la oposición entre pretérito perfecto simple (PPS) y pretérito imperfecto (PI), cada tiempo verbal tiene un conjunto de atributos semánticos que lo definen, dependiendo del contexto de uso y del objetivo comunicativo de los hablantes. Estos atributos no sólo se relacionan con el aspecto verbal, sino también con la función discursiva. Para comprobar la hipótesis, analizamos cuantitativa y cualitativamente los usos de PPS y PI en un corpus de textos narrativos.
In keeping with the prototypical-cognitive approach, which postulates that semantics and pragmatics are motivated by syntax, the present study formulates the hypothesis that in the opposition between the Spanish preterit and the imperfect, each verb tense has a cluster of semantic attributes which define it, depending on the context in which the tense is used and on the speaker’s communicative purpose. These attributes are related not only to the grammatical aspect of the verb but to the discursive function. In order to confirm this hypothesis, the uses of Spanish preterit and imperfect have been analysed qualitatively and quantitatively in a corpus of narrative texts.
El presente trabajo tiene como objetivo principal establecer el prototipo de los tiempos verbales pretérito perfecto simple (PPS) y pretérito imperfecto (PI) a partir de su análisis cualitativo y cuantitativo en diez cuentos breves de narrativa rioplatense. El análisis se enmarca en el enfoque cognitivo prototípico (ECP) (cf.
La división de los niveles de análisis de la gramática (fonética y fonología, morfología, sintaxis, semántica, pragmática) se realiza por fines metodológicos de investigación y no porque se entienda que están totalmente separados; no son módulos independientes, sino interrelacionados. Ya en la morfología advertimos la necesaria relación con la semántica e incluso con la sintaxis. Aunque la morfología se defina, en principio, como ‘el estudio de la estructura interna de las palabras’, no puede ser concebida como un módulo encapsulado de la gramática.
El morfema se define como la ‘unidad mínima y autónoma de significado’
Considerando esta concepción del morfema, en el presente trabajo se postula la hipótesis de que cada tiempo verbal posee un conjunto de atributos semánticos interrelacionados que organizan un ítem polisémico con la estructura de una categoría radial (
A partir de lo postulado en la hipótesis, queda precisar cómo se opera desde el ECP para establecer el valor de un signo lingüístico. Por un lado, se sostiene que el valor de las formas lingüísticas en el sistema de la lengua no se determina por rasgos binarios, sino por confluencia de atributos o propiedades que no deben estar necesariamente presentes en cada uno de los usos de las formas y que otras formas o miembros de una misma categoría pueden compartir parcialmente. Por otro lado, es el análisis de las formas en contexto lo que permite establecer el valor (de uso más frecuente o prototípico) de cada una de ellas.
La teoría de categorización clásica, heredera de los preceptos aristotélicos, fue la primera que se ocupó de explicar el proceso de categorización en los seres humanos y de afirmar que ésta se produce a partir de condiciones necesarias y suficientes. Así, los límites entre las categorías son precisos, reconocibles, y los rasgos entre ellas se entienden de manera contrastiva. Sin embargo, esta teoría no puede explicar todos los casos que conceptualiza el ser humano (como por ejemplo
Para aceptar la teoría clásica, deberíamos creer que las categorías existen en el mundo de manera objetiva y que se definen sólo en términos de propiedades compartidas, y no en términos de las particularidades del entendimiento humano. En contra de este apriorismo, surgieron los estudios de psicología cognitiva en los que
En los próximos apartados, reseñaremos en primer lugar el estado de la cuestión de la oposición entre pretérito perfecto simple y pretérito imperfecto. Luego, a partir de los problemas pendientes, expondremos nuestra propuesta mediante el desarrollo del análisis (cuantitativo y cualitativo) del corpus. Posteriormente, ofreceremos las conclusiones pertinentes.
Desde las gramáticas hispánicas, se han postulado diferentes hipótesis para explicar la oposición entre el pretérito perfecto simple y el pretérito imperfecto del modo indicativo. En primer lugar, se encuentra el sistema temporal planteado por
En el sistema de Bello, el pretérito perfecto simple es un tiempo absoluto denominado
Por su parte, el gramático
Gili Gaya también se inclina por la diferencia aspectual entre ambos tiempos:
La acción pasada que expresamos en pretérito imperfecto nos interesa sólo en su duración, y no en su principio ni en su término. Si digo
Por último, en la
En los estudios dedicados a esta oposición de tiempos verbales, resulta fundamental la obra de
Con un enfoque sociolingüístico,
Entre los trabajos que se han realizado desde el enfoque cognitivo prototípico, se encuentra, en primer lugar, el de
De
Considerando los planteamientos previos, observamos algunas inconsistencias. En principio, los autores que explican la diferencia entre PPS y PI desde el aspecto y el tiempo no consideran el discurso. Además, todas las explicaciones propuestas atienden a un solo atributo o par opositivo (aspecto perfectivo/ imperfectivo; foco/ soporte). En el presente trabajo, se sostiene que la oposición entre PPS y PI debe analizarse teniendo en cuenta todos los factores involucrados: tiempo, aspecto y función discursiva. Además, se propone la hipótesis de que cada tiempo verbal posee un conjunto de atributos semánticos que lo definen. El PPS y el PI, entonces, adquieren diferentes significados según el contexto de uso y el objetivo comunicativo de los hablantes. A partir del análisis discursivo puede determinarse el prototipo de cada tiempo y, de ese modo, establecer cuál es el significado básico.
Retomando la noción de
Elegimos este tipo de narrativa, porque, como advertía Weinrich, las narraciones breves son adecuadas para lograr una visión de conjunto. A partir de la lectura de los cuentos, realizamos los análisis cualitativo y cuantitativo de cada uso de los tiempos PPS y PI. Con respecto al primero, a partir del análisis discursivo de los diez cuentos, surgieron los siguientes atributos semánticos de los tiempos verbales: evento concluido; evento puntual; evento relevante; evento que implica proceso; evento que implica consecuencias en el presente; descripción; evento durativo; iteración; habitualidad; evento permanente. Con respecto al segundo, se cuantificaron los verbos, los atributos y sus combinaciones. A continuación, se detallará la caracterización de cada atributo y se mostrarán los resultados del análisis.
Los atributos que analizamos para cada tiempo verbal pueden clasificarse en los que tienen relación con el aspecto y los que dependen de funciones discursivas dentro de un texto determinado. Entre los atributos considerados aspectuales, tenemos los que aparecen en la desinencia de los verbos (es decir, el aspecto como categoría morfológica) y los que se deducen del significado de la raíz verbal (aspecto léxico) o de otros elementos de la oración (manifestación sintáctica del aspecto, subtipo del aspecto léxico o modo de acción, como veremos en seguida)
Procederemos ahora a definir los atributos semánticos aspectuales, comenzando por el de “evento concluido”, el cual guarda estrecha relación con lo que las gramáticas han denominado
Se llama “evento puntual” al aspecto léxico puntual derivado de la raíz verbal o de otros elementos que en el contexto sintáctico acompañen la interpretación puntual o télica. Para el concepto de
Para De Miguel, existen numerosas subclasificaciones de aspecto léxico. Por un lado, esta categoría expresa la manera en que un evento se desarrolla u ocurre: implicando un cambio (
En la
A partir de tal caracterización del aspecto léxico, veremos varios atributos semánticos relacionados con esta categoría, empezando por el de “evento puntual” en el PPS, que asociamos al aspecto léxico puntual al que se refería De Miguel en casos como el verbo
Luego, el atributo “evento que implica proceso” refiere a un evento concluido pero que transcurrió con cierta extensión en el tiempo. Es decir, se combina el aspecto perfectivo morfológico con el durativo del aspecto léxico. Veamos un ejemplo en el siguiente fragmento de “A la deriva”, de Horacio Quiroga: “La corriente del río se precipitaba ahora hacia la costa brasileña, y el hombre pudo fácilmente atracar.
En seguida, el atributo “evento que implica consecuencias en el presente” se corresponde con los eventos que, aun narrados en pasado, tienen una consecuencia o cierta influencia en el presente de la enunciación. Por ejemplo, en la frase “
Al respecto de este atributo, cabe hacer una aclaración relacionada con la variedad de español rioplatense, que es la que se estudia en el presente trabajo. Ya en la
La forma pretérito perfecto simple admite empleos que pueden abarcar también a los de pretérito perfecto compuesto. En la mayor parte de los países americanos se aceptan ambas formas en los contextos propios del perfecto de experiencia y en algunas variantes del llamado evidencial (2009, § 23.9r).
Tal ocurre, por ejemplo, en una oración como “Es la mejor novela que publicó/ ha publicado hasta ahora”. En el caso de nuestro corpus, no encontramos usos del pretérito perfecto compuesto, por lo que, en lugar de ese tiempo, se emplea el pretérito perfecto simple con predominio de este atributo, que denominamos “evento que implica consecuencias en el presente”, para dar cuenta de un atributo aspectual que no supone sólo el aspecto perfectivo (evento concluido), sino una resonancia en el presente de la enunciación.
Por su parte, el atributo “evento durativo” denota el valor de aspecto imperfectivo que puede expresar una forma verbal, o sea, el aspecto morfológico que las gramáticas atribuían al pretérito imperfecto. Ejemplo de ello es el inicio de “A la deriva”: “El hombre pisó algo blancuzco, y en seguida sintió la mordedura en el pie. Saltó adelante, y al volverse con un juramento vio una yaracacusú que, arrollada sobre sí misma,
Sobre la noción de aspecto imperfectivo, cabe destacar el trabajo de
Los atributos “iteración” y “habitualidad” deben entenderse de manera conjunta, ya que la habitualidad se encuentra incluida en la iteración.
El atributo “iteración” refiere, naturalmente, al aspecto iterativo, a la repetición de la acción. Es un tipo de aspecto léxico que puede observarse en un fragmento de “Tres ventanas”, de Norah Lange. En “Mis hermanas mayores
Por último, el atributo “evento permanente” hace referencia al uso de la forma verbal cuando denota una característica esencial de la situación; esto es, se trata de un subtipo de aspecto léxico. Tal ocurre al comienzo de “Tres ventanas”: “La tercera ventana
La
La definición de estos atributos descansa en el principio del enfoque cognitivo prototípico, retomado de la psicología de la Gestalt, de figura/ fondo: se trata de la idea de que en todo discurso hay elementos que se destacan, que son relevantes, y otros que permanecen en el fondo a modo de contexto descriptivo o de marco del evento. El análisis discursivo en estos términos aparece caracterizado sobre todo en un trabajo de
Para Hopper y Thompson, además, hay correlación entre la transitividad y la organización del discurso en términos de cláusulas principales o puestas en primer plano (
Las cláusulas que se corresponden con el primer plano contienen formas verbales conjugadas en pretérito perfecto simple, con aspecto léxico puntual. Esto es, aparece el pretérito perfecto simple como tiempo propio de las cláusulas que denotan los eventos relevantes del relato. En este sentido es que denominamos al atributo “evento relevante”. Volviendo al ejemplo del
En cuanto al atributo “descripción”, se trata de una función discursiva, correspondiente a las cláusulas que se encuentran en un segundo plano, o sea, en un trasfondo. Encontramos múltiples ejemplos en las narraciones, como en el siguiente fragmento de “Cuento policial”, de Marco Denevi: “Decían que
La dicotomía
En este apartado, con base en el análisis cuantitativo de los atributos semánticos, se propondrá la organización categorial del PPS y del PI, tomando como base la teoría de prototipos y el modelo de categorización radial de Lakoff, ambos, fundamentos del enfoque cognitivo prototípico, marco teórico del presente trabajo. En primer lugar, describiremos las teorías de categorización que sostendrán las descripciones de los tiempos verbales bajo estudio. En segundo término, presentaremos los resultados del análisis de los datos.
La estructura de la categoría en términos de semejanza de familia justifica la presencia de miembros dentro de una categoría aunque no cumplan con todos los atributos; basta que cada miembro comparta al menos una propiedad con otro de su categoría para formar parte de ella. Es así como la versión extendida permite dar cuenta de la polisemia de un ítem, como nos interesará demostrar en el presente trabajo respecto de los distintos usos de los tiempos PPS y PI.
Las categorías pueden tener una estructura de semejanza de familia, a la manera de un conjunto de atributos solapados en forma de radio. Esto es lo que reformula Lakoff con el nombre de “modelo de categorización radial”, como se describirá en el subapartado siguiente.
Considerando estos planteamientos del enfoque cognitivo prototípico, en este trabajo se propondrá la organización semántica de los tiempos PPS y PI como categorías con estructura radial a partir del análisis cuantitativo del corpus.
El uso de valores escalares para la clasificación de los atributos está fundamentado en la idea de que cada verbo posee más de un atributo, aunque siempre habrá un atributo predominante (con mayor peso) en cada verbo. El mayor o menor peso depende de la interpretación discursiva que tenga la forma verbal en el contexto en el que esté inserta.
En la
.
Asimismo, en la lectura de la
Ahora bien, para la conformación del prototipo de cada tiempo verbal, no basta con analizar los atributos de manera aislada, sino que también debe considerarse la combinación de los atributos que ocurre en cada uso de PPS y PI, a partir del peso que se le haya dado a cada uno en el análisis. A continuación, veremos las gráficas de cada prototipo, elaborado con base en la cuantificación de las combinaciones de atributos.
Respecto del PPS, en la
En la
a: evento concluido, evento puntual y evento relevante (67): “Una mañana Pedro se
b: evento concluido (61): “Le
c: evento concluido y evento puntual (41): “La risa se
d: evento concluido y evento relevante (35): “Sin embargo, cuando pasaron junto a él, ellos no
e: evento concluido, evento relevante y evento que implica proceso (27): “Entonces su ventana
f: evento concluido y evento que implica proceso (24): “Por eso
g: evento concluido, evento puntual y descripción (10): “Me
h: evento concluido y descripción (6): “Yo siempre
i: evento concluido, evento que implica proceso y descripción (6): “El hombre postrado se quedó solo; su mano izquierda
j: evento concluido, evento relevante, evento que implica proceso y descripción (5): “Su sangre lo
k: evento concluido, evento puntual, evento relevante y descripción (3): “Recabarren no lo
l: evento concluido e iteración (2): “-¡Pedro, Pedro! -
m: evento concluido, evento relevante y evento con consecuencias en el presente (2): “-Sabemos que Fabbri tenía enemigos -dijo Lainez-. Coleccionistas resentidos, como Santandrea, varios contrabandistas de rompecabezas, hasta un ingeniero loco, constructor de juguetes, con el que se
n: evento concluido, evento puntual, descripción e iteración (2): “Una o dos veces lo
o: evento relevante y evento que implica proceso (1): “La mujer despertó,
p: evento puntual, evento con consecuencias en el presente y descripción (1): “
q: evento puntual y evento relevante (1): “Arrellanado en su sillón favorito, de espaldas a la puerta que lo hubiera molestado como una irritante posibilidad de intrusiones, dejó que su mano izquierda acariciara una y otra vez el terciopelo verde y
r: evento concluido, evento que implica proceso y evento durativo (1): “
s: evento concluido, evento que implica proceso y evento con consecuencias en el presente (1): “
t: evento concluido, evento que implica proceso, evento con consecuencias en el presente y descripción (1): “
u: evento concluido, evento relevante e iteración (1): “Una tarde Armando llegó cansado del trabajo, se quitó los zapatos,
v: evento concluido, evento relevante y descripción (1): “Recabarren vio el chambergo, el largo poncho oscuro, el caballo moro, pero no la cara del hombre, que, por fin,
w: evento concluido, evento relevante, evento con consecuencias en el presente y descripción (1): “También combinamos las letras de la Piedad buscando anagramas.
x: evento concluido, evento puntual, descripción y habitualidad (1): “La mujer jamás le
y: evento concluido, evento puntual y evento que implica proceso (1): “En eso se
A partir de estos datos, observamos que el prototipo del PPS se compone de la combinación de atributos de “evento concluido” y “evento puntual”. Luego, por razones discursivas, también se usa para el “evento relevante” del relato. Suma el atributo “evento que implica un proceso” por influencia del
Finalmente, hay combinaciones muy marginales, como la de “evento concluido, evento relevante, evento con consecuencias en el presente y descripción”, que se encuentra una sola vez en la frase inicial del mismo cuento de Pablo de Santis: “
Otra combinación única de atributos se dio en el caso del conjunto “evento concluido, evento puntual, descripción y habitualidad” en “Rumbo a la tienda donde trabajaba como vendedor, un joven pasaba todos los días por delante de una casa en cuyo balcón una mujer bellísima leía un libro. La mujer jamás le
Véase en el
Con una frecuencia importante, pero menor, se encuentran los atributos de “evento concluido” y “evento relevante” -v.gr. “Una noche, cuando todas nos hallábamos acostadas, Irene
De igual modo, el atributo “evento concluido” se combina con el de “evento que implica un proceso”, que también es un atributo de aspecto léxico, como “puntual”, pero significa lo contrario. Es decir, se trata de la combinación de PPS y raíces verbales que denotan un proceso, como en “La
En menor medida, la combinación de atributos “evento concluido” y “eventos con consecuencias en el presente” suma un significado que no es aspectual, sino que depende del discurso en el que esté inserto, como en “Sabemos que Fabbri tenía enemigos -dijo Lainez-. Coleccionistas resentidos, como Santandrea, varios contrabandistas de rompecabezas, hasta un ingeniero loco, constructor de juguetes, con el que se
Finalmente, y de manera marginal, con baja frecuencia y con menos atributos en común, encontramos significados del PPS que lo acercan a la categoría del PI, pero que se alejan bastante del significado central; por eso los vemos ilustrados en el margen derecho del
Con respecto al pretérito imperfecto, véase en la
a: descripción y evento durativo (139): “
b: descripción y evento permanente (47): “La tercera ventana
c: descripción, evento durativo, iteración y habitualidad (22): “Ya
d: evento durativo (15): “Cuando despertó el Otro Yo
e: descripción (13): “El muchacho no tuvo más remedio que dejar de reír y, al mismo tiempo, sintió a la altura del esternón un ahogo que
f: descripción, iteración y habitualidad (10): “El Otro Yo
g: descripción e iteración (3): “El médico
h: descripción, evento durativo y habitualidad (2): “Decían que vivía sola, que era muy rica y que
i: descripción, evento durativo e iteración (2): “Lejos de los demás, el gurí
j: evento durativo y evento permanente (1): “El muchacho no tuvo más remedio que dejar de reír y, al mismo tiempo,
k: evento durativo, iteración y habitualidad (1): “Los domingos de mañana al hacerse la toilette
m: evento que implica proceso, descripción y evento durativo (1): “A veces a los dedos les
A partir de los valores que arroja la
En el
Luego, el atributo “descripción” se combina con otros significados que son aspectuales: por un lado, con el atributo de “evento durativo”, es decir, el aspecto morfológico imperfectivo -como en “
En el siguiente apartado, mostraremos cómo realizamos el análisis cualitativo del corpus, que consistió en integrar el análisis discursivo al análisis gramatical y en abstraer, de ese modo, los atributos semánticos medidos. Para este trabajo, seleccionamos el análisis de cuatro cuentos extraídos del corpus: “Tres ventanas”, de Norah Lange; “El pequeño rey zaparrastroso”, de Eduardo Galeano; “A la deriva”, de Horacio Quiroga; y “Continuidad de los parques”, de Julio Cortázar.
El PPS también aparece en una serie de eventos que se presentan como concluidos, aunque tienen cierta duración en el tiempo. Por ejemplo, en “siempre
El breve cuento de “El rey zaparrastroso” está construido sobre una oposición entre eventos repetidos y un evento único. Esto se traduce en el uso del PI y el PPS a partir de una oposición entre el aspecto léxico de habitualidad y la aparición del PPS para dar cuenta de un evento único que resulta relevante en la narración.
En los dos primeros párrafos del relato, los más extensos, se construye como escenario, o telón de fondo, una rutina, una serie de eventos que se conceptualizan como iterativos, no sólo por la predominancia del PI, sino también por la presencia de ciertos elementos lingüísticos, como
Esa costumbre, esa repetición de acciones que realiza el gurí, se ve interrumpida por un hecho único: el regalo de la guitarra. Aquí irrumpe el PPS, encabezado por el temporal
En el inicio de “A la deriva”, las acciones que describen al personaje están narradas en PPS, ya que se trata de una sucesión de “eventos relevantes” y “eventos concluidos”: “El hombre
A su vez, la marca del envenenamiento -que inicialmente son dos puntitos- va transformándose, agravándose. No es nunca igual a sí misma. Aquí también el PI nos da la idea del proceso, de algo que se está desarrollando y que, como tal, puede cambiar. Las acciones que realiza el hombre a propósito de su herida, que evoluciona, se perciben como puntuales, o más breves, en relación con eso que avanza sin remedio.
El fin del proceso de envenenamiento, de la agonía, se muestra de forma económica y repentina; con tres eventos en PPS se cierran el relato y la vida del personaje: “De pronto
Finalmente, “Continuidad de los parques” plantea una estructura narrativa diferente a las anteriores; presenta un relato dentro de otro sin límites precisos, en el que se opone el mundo del lector al de los personajes de la novela leída. El cuento ofrece, entonces, dos espacios definidos que en un momento del relato se funden, sin que podamos percibir tal fusión con exactitud. En esa oposición, los tiempos verbales pretéritos cumplen funciones diferentes, absolutamente discursivas, más allá de sus significados aspectuales (“evento concluido” para el PPS y “evento durativo” para el pi). La función discursiva del PPS es introducir y sostener el escenario de la lectura y de la relación del lector con la novela, como vemos ilustrado en “La
Hacia el final, observamos cómo el desenlace de la novela y el del cuento coinciden: los dos mundos confluyen. En el armado de esa fusión, que es el clímax de la historia, el narrador vuelve al PPS, porque indica “eventos relevantes” que nos reencuentran con el mundo del lector: “
A partir del análisis cualitativo y cuantitativo de diez cuentos de narrativa breve contemporánea, concluimos que para entender la oposición entre pretérito perfecto simple y pretérito imperfecto, y para caracterizar semánticamente cada tiempo verbal, hay que considerar todos los factores involucrados: no solamente el aspecto morfológico (concluido
El análisis nos permitió establecer el ítem polisémico de cada tiempo verbal. El prototipo del pretérito perfecto simple reúne los atributos “evento concluido” y “evento puntual”. Por razones discursivas, también aparece en eventos relevantes del relato; por influencia del aspecto léxico, suma el atributo “evento que implica un proceso”; y en frecuencias bajas, se usa para expresar eventos que tienen consecuencias en el presente. También presenta usos marginales que lo acercan al PI, ya que puede expresar “descripción” o “iteración”. Por su parte, el ítem polisémico del pretérito imperfecto reúne el atributo “descripción”, que se combina en mayor medida con el de “evento durativo” y, en una frecuencia inferior, con el atributo de “evento permanente”. Con menor número de ocurrencias, estos atributos se combinan con los de “iteración” o “habitualidad”. No encontramos casos del PI que expresen valores del PPS.
Por último, en el análisis cualitativo de las formas en los cuentos seleccionados, se demostró que el significado de los tiempos verbales depende del contexto discursivo. Así, en una estructura narrativa canónica, suele usarse el contraste entre PPS y PI para denotar una diferencia aspectual y de eventos relevantes contrapuestos al trasfondo de la trama (la descripción). Sin embargo, en estructuras narrativas diferentes, podemos encontrar otros usos, como el contraste entre aspecto iterativo y “evento relevante” en el cuento “El pequeño rey zaparrastroso”, de Eduardo Galeano, o la diferenciación de mundos en el de “Continuidad de los parques”, de Julio Cortázar. Esto evidencia que las formas sólo pueden analizarse en contexto, y sólo de ese modo podremos comprender y describir su significado.
La definición cognitivista de morfema como ‘unidad mínima de significado’ se contrapone con otras que responden a gramáticas formales que analizan la oración descontextualizada, como la de PENA: “Unidad mínima del análisis morfológico y gramatical o de la primera articulación” (1999, p. 4318). Unidad mínima gramatical y no semántica, ya que para Pena “no siempre es posible atribuir un significado determinado a las unidades mínimas obtenidas en el análisis formal de la palabra” (
Para el concepto de
El corpus está conformado por los siguientes textos: “A la deriva”
En todos los ejemplos citados, las cursivas son nuestras.
Se denomina
A este respecto, aclara la
La